El varón de 69 años de edad, natural de Tomelloso, para el que la Fiscalía Provincial de Ciudad Real pide 12 años de prisión, como presunto autor de un delito continuado de abusos sexuales a una menor, que ahora cuenta con 18 años, ha negado los hechos este miércoles, 17 de mayo, en la Audiencia Provincial de Ciudad Real en la que se le juzga, asegurando que «no tenía apetencia sexual porque tuve una operación de miocardio, por la que no podía hacer ningún tipo de esfuerzo por recomendación del médico». Así pues, a preguntas de su abogado, puesto que el acusado se ha negado a responder tanto a la abogada de la acusación particular como a la Fiscalía Provincial de Ciudad Real, también ha señalado que padece «diabetes crónica, así como una vasectomía mal hecha» que ha provocado que «desde entonces, tenga disfunción eréctil». En este sentido, «no podía hacer ningún tipo de esfuerzo, por recomendación del médico porque me dijo que me podía dar un infarto o cualquier otra cosa».
De igual manera, con relación al tiempo que supuestamente pasaba la víctima en su domicilio, el acusado ha asegurado que «iba a ver los perros y a las gallinas, que las tenía en el corral». Además, ha recordado que «cuando ella estaba de visita, mi nuera la atendía», por lo que «solo pasaba unos 5 ó 10 minutos en casa». En este sentido, el acusado considera que «todo es una patraña que han buscado ella o la madre para sacar dinero» y que «presume que la mentira la inventó la madre». Asimismo, ha continuado asegurando que la víctima «estaba siempre en la calle jugando al fútbol con los muchachos y esas cosas», así que «es conocida en el barrio como alguien que mentía continuamente».
Tras las declaraciones del acusado, la víctima ha contado que lo conoció «porque acudía a un parque que estaba muy cerca de casa donde iba con su hermano y amigos del barrio a jugar», y que «les invitó a unos helados». A partir de ese día, reconoce que «empecé a ir yo sola», relatando los abusos que habría padecido desde 2016 hasta 2020. En este sentido, ha reconocido que el acusado le daba «10, 15 o 17 euros cada vez que iba a su casa, después de pasar lo que pasaba y me decía que si contaba algo, ya verás lo que le va a pasar a tu madre y a tu abuela». De hecho, ha relatado que «hubo una temporada que discutía mucho con mis padres y con mi hermano, mis padres me preguntaban de dónde sacaba el dinero y yo les decía que me lo habían dejado mis amigos pero nunca les dije que él me daba dinero».
A preguntas de la Fiscalía Provincial de Ciudad Real, la víctima también ha contestado que «cuando me pasó aquello, hacía trastadas por la calle, discutía con mi madre, pegaba puñetazos a todos lados y me rajaba en un brazo con un cuchillo». Versión que ha coincidido con la que han realizado, en calidad de testigos, los padres y hermanos de la víctima. Así pues, han corroborado que «cuando salía de casa se ponía muy nerviosa, notamos que su comportamiento no era normal desde que cumplió 12 años porque siempre había sido una niña muy cariñosa». De hecho, el padre era el que denunciaba los hechos en junio de 2016.
La Fiscalía Provincial de Ciudad Real pide 12 años de prisión para un varón de 69 años de edad, natural de Tomelloso, como presunto autor de un delito continuado de abusos sexuales. Se le juzgará en la Audiencia Provincial de Ciudad Real desde este miércoles, 17 de mayo, donde se reconstruirá cómo el pasado año 2016, cuando el acusado contaba con 62 años, residía en una vivienda a la que comenzó a acudir la menor, de 11 años de edad, normalmente acompañada de más niños, para ver a los animales con los que contaba el acusado. Así hasta que, durante un tiempo, la menor comenzó a acudir sola a dicha vivienda en la que, en varias ocasiones, el acusado abusó sexualmente de ella. En determinados momentos, le daba a cambio algunas cantidades pequeñas de dinero, así como le permitía ver a los animales. Todo ello durante un año, cuando la menor continuó acudiendo al domicilio de su agresor, que continuaba abusando sexualmente de ella.
Así hasta que, cuando la menor cumplió 12 años, el acusado comenzó a pedirle que tuvieran relaciones sexuales completas. Algo que se produjo ininterrumpidamente hasta el pasado año 2020, cuando la menor le contó a su padre lo ocurrido, que denunció los hechos ante la Guardia Civil. De hecho, desde el pasado día 7 de junio de 2020, el Juzgado Número 1 de Tomelloso dictó un auto, en el que acordaba la prisión provisional comunicada del acusado, quedando en libertad con cargos el pasado día 23 de julio de ese mismo año, aunque con la prohibición de acercarse a menos de cien metros de la víctima. Ahora, además de solicitar 12 años de prisión para él, la Fiscalía Provincial de Ciudad Real también ha pedido que no pueda acercarse a menos de doscientos metros de la menor durante los próximos 13 años, además de indemnizarla con 20.000 euros por los daños morales causados.