El Juzgado de Instrucción Número 2 de Manzanares está coordinando un operativo, en colaboración con la Guardia Civil, que comenzaba ayer miércoles, 31 de mayo, de inspección de dos pozos ubicados en dicho término municipal, donde se está buscando el cuerpo del empresario Jesús María González, de 55 años de edad, al que se le perdió la pista el pasado día 19 de junio de 2019. Así pues, este jueves, 1 de junio, se ha reanudado el rastreo, al que se han sumado más agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), debido a la profundidad de los pozos donde se está buscando. En este sentido, la Guardia Civil ha desmentido que, tal y como han publicado distintos medios de comunicación, así como había asegurado el abogado de la familia del desaparecido, Dionisio Pérez, se haya encontrado algún cuerpo.
Lo que sí es seguro es que, en el el exhaustivo rastreo de los pozos, se encuentran presentes Antonio Caba y Gaspar Rivera, para los que se dictó prisión provisional hace solo algunas semanas por su presunta participación directa en el homicidio o asesinato de Juan Miguel Isla, cuyo cadáver también era encontrado en el pozo de una propiedad, ubicada en la localidad ciudadrealeña de Valdepeñas, después de llevar desaparecido desde el pasado día 22 de julio de 2022. Al parecer, este operativo se habría activado después de que Gaspar Rivera declarara en sede judicial estar implicado también en la desaparición de Jesús María González. Sobre ambos se tenían sospechas desde hacía algunos meses puesto que, según adelantaban en exclusiva Castilla-La Mancha Media, así como El Periódico de España, la Guardia Civil estaba investigando la posible relación entre la desaparición de Juan Miguel Isla con la de Jesús María González, ocurrida en la misma localidad ciudadrealeña de Manzanares tres años antes.
Así pues, a Jesús María González, de 55 años de edad, conocido empresario de máquinas tragaperras, natural de Vitoria pero residente en Manzanares, se le perdió la pista después de vender dos vehículos de alta gama, concretamente de la marca Mercedes, por un valor de 14.000 euros cada uno. Al parecer, en dicha transacción, habría hecho de intermediario Antonio Caba que, tres años después, también habría ayudado a Juan Miguel Isla a vender unas tierras. Al parecer, ambos habrían desaparecido después de citarse con este mismo hombre, ahora detenido, para cobrar por la venta de dos coches, así como de una finca. De hecho, Jesús María González no tomó un vuelo a Paraguay al día siguiente de su desaparición, tal y como tenía previsto.
La jueza Alba María Nicolás, titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Manzanares, enviaba a prisión el pasado viernes, 17 de marzo, a Antonio Caba, por su presunta participación directa en el homicidio o asesinato de Juan Miguel Isla, cuyo cadáver era encontrado en el pozo de una finca, propiedad del detenido, ubicada en la localidad ciudadrealeña de Valdepeñas, después de llevar desaparecido desde el pasado día 22 de julio de 2022, cuando se desplazó de Alicante a Manzanares para cobrar unas tierras. Unos restos mortales que se encontraban el pasado martes, 14 de marzo, dentro de la Operación Mancanti, en la que participaban conjuntamente los agentes de la Guardia Civil de Ciudad Real, de la Unidad Central Operativa (UCO), de los Grupos de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS), de criminalística, así como del grupo de montaña de la Guardia Civil. Tras el hallazgo, se detenía a dos personas por su presunta relación con la desaparición, a los que se les imputa un delito de homicidio. Se trata de Antonio Caba, que había hecho de intermediario en la venta de dichas tierras del desaparecido, además de un colaborador de éste, Gaspar Rivera, de 78 años de edad, para los que se ha dictado prisión provisional.
