La Guardia Civil localizó en Ciudad Real el pasado sábado, 23 de marzo, a una niña de 13 años de edad que estaba embarazada de 12 semanas y que había sido obligada a casarse. La gestación de la menor es ya la segunda tras un aborto anterior debido a malformaciones en el feto. La operación, que se ha desarrollado dentro de las actuaciones que la Guardia Civil viene desarrollando para erradicar la trata de seres humanos, se ha saldado con la detención del marido de la menor y de los padres de ambos cónyuges.
La investigación se inició a raíz de que la Benemérita tuviera conocimiento, a través de las Fiscalía de Menores, de que una niña de tan solo trece años de edad había sufrido una interrupción voluntaria del embarazo por una grave malformación en el feto. Por ello, los agentes iniciaron gestiones a fin de dar con el paradero de la menor y conocer su estado, descubriendo que la joven se encontraba nuevamente embarazada. Así, la Guardia Civil pudo constatar que la menor había sido captada a través de redes sociales en marzo de 2023 con la finalidad de contraer un matrimonio concertado con un varón residente en la localidad ciudarrealeña de Moral de Calatrava. Dichas averiguaciones llevaron a las autoridades a activar el protocolo de desamparo de menores con carácter de urgencia, haciéndose cargo de la menor la Consejería de Bienestar Social de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. El hombre con el que se casó la menor ha sido detenido y se le acusa de un delito de trata de seres humanos por el matrimonio forzado, además de un delito de agresión sexual. Los padres de la menor y del varón implicado también han sido detenidos, a quienes se les acusa por otro delito de trata de seres humanos con fines de matrimonio forzoso.