Esta mañana la familia de Blas Camacho Zancada ha recogido el titulo honorifico de Hijo Predilecto de Tomelloso, que le ha hecho entrega el Ayuntamiento de Tomelloso. Acto que ha estado presidido por el alcalde de la ciudad, Javier Navarro y la teniente de alcalde, Eloísa Perales, los cuales han estado acompañados de los miembros de su equipo de gobierno, Elena Villahermosa, Jesús Lara y Carmen López.
El encargado de hacer los honores y hacer un paso por la vida del homenajeado ha sido su hijo, Blas Camacho González, un titulo que le concedieron en en vida, pero que desgraciadamente no ha podido ver realizado por su fallecimiento hace cuatro años, señalando que su padre «estuvo orgulloso por esta distinción de su pueblo y se emocionó por dicha gratitud». Indicando que este titulo «representa el reconocimiento de una vida dedicada al servicio a la justicia y a la fe».
Además, ha hecho un recorrido por la vida y el legado de su padre, por su trayectoria profesional como abogado, por su faceta humanitaria y solidaria, desarrollada a través de la ONG Cooperación Internacional, de la que fue fundador, por su implicación en la causa de beatificación de Ismael de Tomelloso y por su paso por la política, actividad que entendía “como un espacio para tender puentes entre las diferencias”. Ha destacado su “dedicación absoluta” como representante público y su “compromiso” con España, “movido por una convicción inquebrantable en favor de su unidad, siempre desde el diálogo y la reconciliación”.
Durante su intervención ha dado las gracias al Ayuntamiento por el homenaje “que nos recuerda cuánto significó Blas Camacho para este pueblo”. “Gracias por permitirnos revivir con este homenaje la grandeza de un hombre que amó profundamente a su pueblo y que dejó en cada uno de nosotros una huella imborrable”.
La encargada de recoger la distinción ha sido su mujer M.ª Cruz González, la cual ha señalado que es un reconocimiento que, «honra y enorgulleció a Blas y a todos los que le queremos». Añadiendo, «aunque hace casi cuatro años que nos dejó, sigue muy presente en nuestros corazones y en cada rincón de esta tierra que tanto amaba». Por ello ha querido mostrar su gratitud «a esta maravillosa tierra de Tomelloso», añadiendo «siempre ha sido para Blas más que un lugar de origen, su causa, su orgullo». Indicando que el homenajeado llevo el nombre de Tomelloso «allá donde fuera». Además ha agradecido a todos los amigos de la infancia de Blas que se encontraban allí presentes y a los compañeros de la Asociación de Ismael de Tomelloso, ya que una de las misiones de su vida, fue apoyar la causa de canonización de Ismael.
El alcalde de Tomelloso ha destacado su profundo «humanismo cristiano, que desbordaba en todo lo que hacía», así como su «vocación política, intensa y comprometida” y sus “sólidos principios democráticos”. Además ha afirmado que se trataba de «una persona de una gran educación y formación, culto y de grandes conocimientos», añadiendo que “dominaba la palabra, porque también su tono de voz era amable y tranquilizador”. Recalcando “de esas personas que sabías que te iba a convencer porque no te iba a engañar”.
Tomelloso fue la ciudad, ha dicho también el alcalde, “a la que tanto amó en registros y gente” y por la que “luchó” desde su posición política, “representando y defendiendo sus intereses y trabajando por conseguir avances sociales, laborales e industriales, todo para que Tomelloso siempre fuera a más”. Y todo ello, “con la increíble habilidad de parecer que no hacía nada, puesto que la virtud de la humildad adornaba su magisterio”.
Blas Camacho Zancada, fue diputado de UCD en el Congreso durante la primera legislatura Constituyente, en la que pudo defender el proyecto de Estatuto de Castilla-La Mancha, el camino, dijo “en el que todos debemos ponernos a trabajar para sacar adelante la región”.
Fue además, ha recordado el alcalde, protagonista, “no un actor de reparto”, de la Transición, proceso de “paz y concordia, de diálogo constante, de negociaciones, de cesiones y de retos”, durante lal que luchó “por la libertad” y “por un futuro mejor” y porque “hoy podamos disfrutar de uno de los mayores tesoros que tiene España: la democracia”.
