La Policía Nacional ha detenido en Ciudad Real al conductor de un vehículo, cuando transportaba 130 gramos de cocaína, que se encontraban ocultos en un habitáculo de dicho turismo. El detenido, un experto en la distribución de drogas, al contar con antecedentes penales por delitos contra la salud pública, era interceptado en el momento de su regreso a Ciudad Real, después de haber adquirido la droga en Madrid. La transportaba oculta en una caleta situada debajo del asiento del copiloto, contando con una apertura a distancia mediante un resorte mecánico.
Los agentes de la Policía Nacional, que le seguían la pista desde hacía varios meses, sospecharon de uno de sus desplazamientos a Madrid, e interceptaron el vehículo a su llegada a Ciudad Real donde, presuntamente, se disponía a introducir y procesar la cocaína en dosis para, posteriormente, venderla directamente a los consumidores, tanto en la capital como en localidades aledañas. Además de torpedear la labor policial, a sabiendas de que la droga se encontraba oculta en un compartimento del turismo casi imposible de detectar, también depositó a modo de señuelo parte de la droga tras la palanca de cambios, para así distraer la atención de los policías del escondite principal.
Sin embargo, la pericia de los agentes la Policía Nacional permitió localizar el mecanismo de apertura a distancia de la caleta, donde se encontraba el montante principal de cocaína. Así pues, se le han intervenido un total de nueve cápsulas de cocaína, contando con un peso bruto de 130 gramos, además de 255 euros en metálico, así como el vehículo en el que ocultaba la droga.