La Guardia Civil ha detenido a tres varones a los que se les atribuye la autoría de un delito de robo con fuerza y mas de 16 delitos continuados de hurtos de crucifijos de cobre o latón de las lápidas y sepulturas de los cementerios de las localidades toledanas de Borox, Seseña y Pantoja. La investigación se llevó a cabo, tras un aumento de delitos contra el patrimonio en los camposantos, por los agentes del Área de Investigación del Puesto Principal de la Guardia Civil de Seseña, bajo el nombre de operación «Transire 36».
Las primeras investigaciones les llevaron a realizar inspecciones técnicas oculares en el lugar de los hechos así como recoger testimonios relevantes. Además, tras el seguimiento de la documentación de las recuperadoras donde se realizan posibles ventas, se pudo saber mas sobre los hechos denunciados. Fue tras un aviso de la presencia de un vehículo y dos personas en las inmediaciones del cementerio de Pantoja, en Toledo, cuando la patrulla de la localidad vecina de Villaluenga de la Sagra sorprendió a los sospechosos sustrayendo crucifijos de las lápidas y sepulturas.
Dichos actos vandálicos se descubrieron el pasado día 22 de diciembre cuando el propio alcalde del municipio toledano de Pantoja, Julián Torrejón, fue alertado por una vecina de la presencia de unos individuos que estaban robando crucifijos en el cementerio de la localidad. El primer edil se desplazó hasta el lugar y, tras visionar las grabaciones de las cámaras de seguridad, denunció ante la Policía Local la identificación del vehículo de los autores. Según puede verse en las imágenes, un hombre llegó alrededor de las 12:30 de la mañana y, tras una hora recorriendo el camposanto, se marchó para volver una hora y media después junto a otros dos individuos que comenzaron a arrancar los crucifijos de bronce.
Al llegar, los agentes descubrieron el material sustraído se encontraba a las afueras del cementerio. Hasta 17 crucifijos habían sido arrancados de sus sepulturas y preparados para ser trasladados, con unos daños que ascienden a más de 20.000 euros. Ahora, además de la detención de los autores, se han podido recuperar el resto de crucifijos robados. Parte de ellos se encuentran en dependencias de la Policía Local del Ayuntamiento de Pantoja, donde los vecinos afectados pueden identificarlos y recuperarlos. Ha sido a través de la red social Facebook donde el consistorio agradecía públicamente “la colaboración vecinal, las cámaras de Vigilancia locales y la Impecable profesionalidad de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que han dado su fruto”.